Gafas de esquí: todo lo que debes saber
Con la temporada de nieve, también llega la práctica de deportes de invierno. Lo primero que te viene a la mente cuando preparas tu viaje a la nieve son los esquís, la tabla de snowboard o un traje que te resguarde del frío, y al final, acabas tomándote a la ligera otras cosas, como las gafas de esquí.
En cotas más altas, y a causa del reflejo del sol en la nieve, los ojos están mucho más expuestos a los rayos ultravioletas que en otros lugares, así que es totalmente recomendable usar este accesorio de esquí en todo momento. En caso contrario, el sol puede deteriorar tu vista, generando irritaciones y pérdida provisional de visión, también conocida como “la ceguera del esquiador”.
Por ello, desde Esquiades.com hemos decidido recoger todos los aspectos que hay que tener en cuenta a la hora de comprar tus gafas de esquí, y seguro que quedas sorprendido con alguno de ellos. Cuando conozcas todos estos trucos, se convertirán en una parte imprescindible de tu equipo de esquí, ayudándote a prevenir posibles lesiones oculares. Y si no lo crees, ¡compruébalo tú mismo!
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Gafas de esquí seguras
Para esquiar con garantías, la compra de unas gafas, también conocidas por los más expertos como máscaras de esquí, no debe basarse en modas o criterios estéticos. Lo primordial es asegurarse de que cuentan con el filtro anti-rayos ultravioleta y la garantía de la Unión Europea (que nos indicará que tienen el 100% de protección). Conviene tener en cuenta que el 70% de gafas del mercado incumple la normativa. ¿Lo sabías?
Paralelamente, debes comprobar que tus lentes sean de categoría S4 (específicas para condiciones de alta montaña) o, como mínimo, de S3, para que tus ojos no sufran el efecto de las radiaciones. Las lentes de categoría inferior (S0, S1 y S2) no son nada recomendables, ya que sólo se utilizan en días excesivamente nublados y con muy poca luminosidad.
Además, te aconsejamos que el material de fabricación sea de policarbonato, debido a su resistencia. Piensa que tus gafas de esquí soportan golpes y caídas, así que, si no quieres comprarte unas nuevas cada temporada, te recomendamos monturas duras y que no resulten cortantes para evitar daños en el rostro u ojos.
Comprobados los aspectos básicos, toca elegir modelo. En los deportes de nieve, los hay de diversas formas y prestaciones según la marca, así que nuestro consejo es fácil: prueba hasta dar con aquel que se ajuste mejor a la forma de tu cara, cubriendo el rostro hasta las cejas, sin comprimir demasiado la nariz.
Importante: es muy recomendable escoger unas gafas de esquí que te ofrezcan un amplio campo visual. Y si usas caso y no quieres helarte de frío, ¡asegúrate de que no pase aire por la frente o los laterales!
Gafas de esquí según el color de la lente
Nieve, nubes, niebla, sol… Son muchas las situaciones meteorológicas y lumínicas que se pueden dar en tu fin de semana de esquí. Por ello, los colores de las gafas de esquí se hacen pensando en la luz: las lentes pueden ser casi transparentes (categoría S0) cuando la visibilidad es escasa, como los días con niebla o de noche; de color amarillo (categoría S1) para aumentar el contraste cuando nieva; y amarronadas o anaranjadas (categorías S2 y S3) en jornadas soleadas, para evitar el deslumbramiento.
Sabemos qué piensas: si las situaciones son tan cambiantes en la montaña, ¿tengo que comprar hasta 4 tipos de gafas de esquí? ¡Tranquilo! Existe una alternativa: las gafas de esquí fotocromáticas, que se aclaran u oscurecen automáticamente en función de luz del día. A pesar de ser un poco caras, pueden llegar a ser una buena inversión, ya que suplen la necesidad de comprar varias gafas con lentes diferentes. Es como comprar una chaqueta que, según la temporada, se hace más o menos gruesa. ¡Vaya invento!
Gafas de esquí para niños
Toma nota: la pigmentación de los ojos no se completa hasta los doce años. Sorprende, ¿verdad? De ahí la importancia de que los niños lleven gafas de esquí polarizadas siempre. Sus ojos son muy delicados, y los reflejos que produce la nieve, incluso en días poco soleados, pueden provocar daños irreversibles en sus retinas. Si te preguntas cuáles son los criterios para comprar gafas de esquí para niños, no tienes de qué preocuparte, son los mismos que para los adultos. Así que ya sabes: presta atención tanto a la calidad de las lentes como al material del accesorio de nieve.
¿Gafas de esquí graduadas?
Si llevas gafas en tu día a día, durante la práctica del esquí puedes decantarte por las gafas de esquí OTG (over the glasses), que disponen de mayor profundidad en el marco para ajustarse a la mayoría de monturas, es decir, para que quepan las gafas que usas a diario.
Si las over the glasses no acaban de convencerte, puedes usar un adaptador de graduación. Se trata de un suplemento de plástico incoloro que soporta lentes graduadas y que se encaja desde el interior de tus gafas de nieve. Eso sí: deberás acudir al optometrista sí o sí. 😉
Bonus track: gafas de esquí con realidad aumentada
Para terminar, te mostramos algo más fuera de lo común. Y es que el frenético ritmo de las nuevas tecnologías también ha llegado al mundo del esquí y el snowboard. Hablamos de las gafas de nieve con realidad aumentada, también conocidas como RideOn.
Además de los elementos de protección como la pantalla de policarbonato, estas gafas de esquí con realidad incorporan una cámara de alta definición que permite ver el entorno, así como fotografiar y grabar el entorno desde un plano muy subjetivo. ¡Y eso no es todo! Estas también incluyen algunas funcionalidades muy divertidas e innovadoras, que podrás ver en el siguiente vídeo:
Tanto si decides invertir en tus gafas de esquí, como si no, te recomendamos llevar una funda protectora y limpiarlas sólo con toallitas de microfibra, sin detergentes químicos o productos abrasivos, ¡para que te duren muchísimo!
¿Te han gustado nuestros consejos? Si es así, deberías echar un vistazo a nuestras otras recomendaciones sobre accesorios de esquí. Y si tienes cualquier otra sugerencia, ¡encantados de que la compartas con nosotros! 🙂