Nieve, ven ya… Nos estamos volviendo locos sin ti

Los días ya no son lo mismo. Tu caminar ha cambiado, ahora arrastras los pies por el pasillo con la esperanza de sentir lo mismo, pero no. El suelo frío no se asemeja en nada a lo que tú deseas. La suela de tus zapatos tampoco se desliza de la manera adecuada y lo que ya no soportas es como te miran los demás.

Pero tranquilo, nosotros estamos igual que tú, pero un poco más locos. En nuestra cabeza solo se oye una voz diciéndonos: nieve, esquí, menos de 50 días… Así que para mitigar esta dura espera hemos tenido grandes ideas (y un poco locas) para hacer más corto el camino hacia la nueva temporada de esquí.

Llenar la bañera de espuma

Sí, como lo lees, una manera fácil y rápida para recordar la nieve es hacer la mejor fiesta de espuma en tu bañera. El plan es el siguiente: llena tu bañera de agua caliente y echa todo el jabón que puedas. Verás como la espuma empieza a crecer y parecerá que una tormenta de nieve ha pasado por tu baño.

Truco: si compras una bomba de baño de colores azulados el efecto será mucho más divertido. Además, ahora en el mercado puedes hasta encontrar bombas de baño con purpurina 🙂

Pero ¿y si no tienes bañera? Una buena opción es aprovechar esta pequeña excusa y hacer una escapada a algunos de nuestros hoteles de montaña. Muchos de los hoteles que puedes encontrar tienen bañeras muy amplias e incluso bañeras hidromasaje. Nosotros te recomendamos el Centric Atiram Hotel 4*, sus habitaciones son muy amplias y tienen bañeras muy grandes.

Comprar porexpan a montones

¿Te acuerdas de ese corcho blanco que viene con objetos delicados y se divide en cientos de bolitas blancas? ¡Eso es el porexpan! Hazte con un buen trozo y empieza a desmenuzar, el efecto que deja es como si hubiese nevado y ya podrás sentirte un poco más en casa. Y, si quieres añadirle más emoción a esta pequeña locura, ponte tu ropa de nieve.

Dejar que tu nevera lo congele todo a su paso

¿Recuerdas ese episodio de Los Simpsons en el que Bart y Homer montan una tienda de campaña justo en la puerta de la nevera? Pues nuestra idea es esa misma 🙂 Quizás esta actividad no sea energéticamente correcta pero te aseguramos que te sentirás como si estuvieras en la cima y fueras a hacer tu primera bajada. Esa sensación cuando se te hielan las mejillas y la punta de la nariz…

Cambiar tu pijama por el mono de esquiador

¡Fiesta! Apúntate a una noche loca y cambia tu pijama por el mono de esquí. Además, si a esta “fiesta de pijamas” le añadimos un par de documentales de nieve estará genial; y con suerte, soñarás que te deslizas sobre la nieve. Tu mente jugará contigo y sentirás que tampoco hace tanto que no esquías, por lo que tu mono de nieve disminuirá considerablemente (o no jaja).

Poner en tu televisión imágenes de nieve y babear

Olvídate de Netflix y utiliza tu TV de última generación para poner imágenes de nieve. Con la calidad que tienen actualmente las pantallas casi parece que estés ahí mismo. Por otro lado, también puedes ir a una tienda de electrónica y pedirle al vendedor que te ponga imágenes de nieve en todas las pantallas. Si tienes suerte y consigues convencerlo, te quedarás alucinado. Recuerda: una imagen vale más que mil palabras.

Hacer nieve mágica

¿Nieve todo el año? ¡Es posible! Prepárate que viene una tarde de manualidades. Existen muchas “recetas” para crear nieve mágica, nosotros hemos seleccionado una muy sencilla que además es comestible. Solamente deberás mezclar bicarbonato sódico con agua muy fría (por qué la nieve está muy fría ¿no?).

Lo más aconsejable es verter el bicarbonato en una bol grande e ir añadiendo agua hasta obtener la textura que nos guste. El objetivo es que el bicarbonato quede un poco mojado. Quizá no te lo creas, pero el tacto es muy parecido a la nieve ¡te lo aseguramos! Y si aún quieres mejorar tu nieve mágica puedes añadirle purpurina blanca, esto hará que tenga ese aspecto brillante que tiene la nieve cuando le atraviesan los rayos de sol.

Aficionarte a el Kakigori

¿Kaki qué? El Kakigori es un postre japonés hecho de hielo raspado y endulzado con sirope. Sí, sí ¡es el helado de Shin-chan! Para hacerlo solo necesitas una picadora de hielo y picar hasta que el hielo se pulverice. Antiguamente los japoneses rayaban el hielo como si rallaran queso, hasta que se inventó una máquina que ralla el hielo sin necesidad de tocarlo evitando así que se derritiera.

Tejer tu nueva bufanda

Cuando estés aburrido en casa y no tengas nada que hacer hazte con unos palillos gruesos, y un ovillo de la lana más suave que encuentres. Ponte bien cómodo en el sofá y ¡empieza! Primero de todo, deberás montar de 10 a 40 puntos. Y, sigue tejiendo y tejiendo hasta conseguir el largo deseado… ¿Pan comido, no? Mientras tejas tu bufanda, tu cabeza estará concentrada y no pensarás en que… ¡quedan menos de 50 días para empezar la temporada de esquí!

Llenar tu habitación de copos de nubes

Finalmente te invitamos a decorar tu casa o habitación de la manera más invernal posible: copos de nieve cayendo del techo. Pero, estos copos son especiales, ¡son de chuche! Para que así la nueva temporada de esquí salga rodando 🙂 El objetivo es cubrir el techo de copitos, aquí tienes un ejemplo:

¿Qué te han parecido estas divertidas actividades? ¿Tienes alguna más en mente? ¡Déjanos un comentario explicándola! Nos hace mucha ilusión leerte. Y si llevas a cabo alguna de ellas nos encantaría poder ver alguna que otra foto 😛