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Después de tres semanas de clima templado y sin casi precipitaciones, la nieve finalmente ha regresado a distintas zonas montañosas de la Península, como los Pirineos o la Cordillera Cantábrica, que buena falta les hacía a todos.
Una buena noticia para las estaciones de esquí, que se han enfrentado a una importante falta de nieve durante las fiestas navideñas. Sin embargo, la nevada ha sido desigual y si en algunos casos puede mejorar el estado de pistas, en otros apenas ha servido para teñir el suelo de blanco.
El frío ha vuelto al Pirineo aragonés, acompañado de numerosas precipitaciones, según adelantó ayer la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Se han registrado nevadas en amplias zonas de la cordillera con la cota situada entre 1.400 y 1.800 metros, con un fuerte descenso de las temperaturas. En las estaciones de esquí se han acumulado hasta 15 centímetros de nieve nueva y aún se esperan más precipitaciones.
En un comunicado, el grupo Aramón informa que estas nevadas podrían permitir abrir nuevas pistas y ampliar el dominio esquiable de Formigal y Cerler.
En cambio, la nieve no ha llegado a las estaciones de Teruel (Javalambre y Valdelinares) que permanecen cerradas.
En el Pirineo catalán la nieve también ha llegado en cotas altas a partir de 1.700 metros, con cantidades poco importantes de unos cinco centímetros en Baqueira y sólo una encalada en la parte más oriental, como La Molina o Masella.
Tres cuartas partes de lo mismo en Andorra y el lado francés del Pirineo, donde los espesores han llegado a los 9 centímetros en Sorteny o el Col del Portalet, respectivamente.
En la Cordillera Cantábrica, la nieve deja los primeros copos de 2023 tras unas navidades sin manto blanco y con grandes pérdidas para las estaciones de esquí leonesas, que siguen cerradas tras perder la campaña más importante de la temporada.
Con una cota de nieve que oscila entre los 1.600 y los 2.000 m, según AEMET, las pistas han amanecido teñidas con un ligero manto blanco las cumbres y pueblos de la Montaña Leonesa.
La llegada de esta nevada apenas ha dejado entre diez y quince centímetros de espesor en las cotas más altas, pero viene acompañada de temperaturas más bajas que permiten a las estaciones de esquí leonesas fabricar nieve, de cara a plantear la apertura.
De momento no se puede cantar victoria ni mucho menos, pero los primeros copos de 2023 dejan estampas como esta en la Estación Invernal y de Montaña Valgrande Pajares así como en la Estación Invernal y de Montaña San Isidro.
Solo durante el puente de Todos los Santos, el Mirador Solar de Tristaina ha recibido a casi 3.000 visitantes
La estación última los preparativos para la apertura de las pistas de esquí en cuanto las condiciones lo permitan
Los maquinistas de la estación de esquí de Sierra Nevada han iniciado este lunes los primeros trabajos de movimientos de nieve en las partes altas del dominio esquiable, en torno a los 2.900 y 3.000 metros, de cara a la nueva temporada.
